A un paso del infierno

Ando matando el tiempo dando vida a los papeles
en esta soledad tatuada en mis cuatro paredes
desde que yo, deje ser yo, tal vez por temor
de que la vida pasa y no haya tiempo para vernos
soy un enfermo voluntario en los brazos del destino
con lujos de detalles ya conozco este camino
los suelos arderán por donde ande el peregrino
que al llegar a la sima se olvide de donde vino,
una copa de vino y brindamos por tu partida
recuerdos de esta vida que viajan a la deriva
imaginando diva que somos tal y para cual
aunque la duda en este proceso suele ser normal
mucho se habla del amor en estos tiempos de lujuria
mas la cabezas no se enfrían por fuerte que este la lluvia
somos fieles servidores del pecado a plena luz
mis errores son mayores a los clavos de esta cruz ,
un día fuimos, fuimos no volveremos hacer
a menudo se me olvidan las cosas que vive ayer y
eso es tal vez por las no ganas de pensarte
yo en tu mundo no tengo espacio donde colocarme
como pedirle al tiempo tregua y que cambie su rumbo
y convierta los días en meses y los años segundos
la tierra ya no gire y no exista la oscuridad
que el paraíso prohibido sea nuestra realidad
pero todos nuestros sueños al tocarlo concluyen
pues al entregarlo al hombre, el hombre siempre lo destruye
no me lavo las manos hablo la experiencia propia
la verdad nos enseña mientras a otros les choca
esclavo de mi mismo esclavo de mis sentimientos
mi cuerpo quiere besos tus besos y otros recuerdos
aprendido a tragarme el orgullo hasta en ayunas
donde es casual encontrarnos sin tener reacción alguna

Coro:
he visto ya lo suficiente en mi vida pasar he recibido tantos golpes como esta pueda dar y yo no sé si existirá pa mi un castigo eterno aunque tengo reservada dos entradas para el infierno(bis)

una para esta pecadora alma que nunca se cansa
otra para los pecados que inclinaron mi balanza
basta con mirar a la distancia nubes de papel
cae la tinta como lluvia directamente a mi piel
ya dejamos de ser los inocentes niños
ahora con odio pagamos todo falta de cariño
vimos caer al mundo a nuestros pies y no lo levantamos.
caímos justamente y con descaro y reclamamos
pero así es el hombre en este es nuestra naturaleza
lo nuestro termino justo cuando este tema empieza
porfiado caminante que a pesar de que tropiezas
siguen por el camino esperando alguna sorpresa