La de la luz

La de la luz

Se esconde el sol, luna nueva
será que saliste a pasear.
Titilan los postes de la vereda,
la ciudad se queda sin electricidad.

Y sé que sos vos caminando al almacén, capaz,
o yendo a trabajar.
Nadie se anima a brillar
cuando tu luz atropella a las demás.

Salgo yo a caminar
y aprovecho el resplandorcito que vas dejando
y no puedo más,
me acerco un poco a la estela
y acelero el paso.
Y te encuentro sentado en un banco
cantando canciones que no conozco.
Trato de tararear –laralá-
y me hablás de mi luz
y no sé mucho qué decirte.
Pienso que te volviste loco,
y no te das cuenta:
sos vos el foco que rebota en los demás.

Y sé que sos vos caminando
que me hacés brillar
y ya está,
allá voy,
polilla borracha de tanto fulgor.
Y me quiero quedar en este banco
En esta oscuridad que brilla tanto.